Dentro de los «eventi collaterali» de la XIII Bienal de Arquitectura de Venecia, el proyecto «Vogadors. Architectural Rowers: Catalan & Balearic Threads: Hard Materiality for a Permeable Architecture», comisariado por Félix Arranz y Jordi Badia e impulsado por el Institut Ramón Llull, reivindica el potencial de la arquitectura contemporánea catalana y balear a través de nueve proyectos construidos en los últimos años.

Imagen del proyecto «Vogadors». Imagen cortesía de IRL.

La referencia a los «vogadors» (remeros) parte de una frase de Jorge Oteiza: «El que avanza creando algo nuevo lo hace como un remero, avanzando hacia adelante, pero rema de espaldas, mirando hacia atrás, hacia el pasado, hacia lo existente para poder reinventar sus claves», y es una alusión al Mediterráneo, que separa y une a la vez a Cataluña y las Islas Baleares.

El contenido expositivo del pabellón, según los comisarios, «muestra la consciencia de las tradiciones experimentales mediterráneas y responde a la manifestación de un carácter sensible a la cultura de lo necesario y lo común». En esencia se trata de una arquitectura sobria, de gran sencillez material, pero de una enorme sofisticación técnica e intelectual, dotada de un fuerte componente ético y social, capaz de construir una consciente permeabilidad con su entorno, con las personas y la vida, sin renunciar a los valores más abstractos y plásticos de la emoción.

Fuente: Arquitectura Viva

Título de evento: Pabellón catalán y balear en la Bienal de Venecia 2012
Lugar: Varias sedes
Ciudad: Venecia
País: Italia
Fecha: Del 29 de agosto y el 25 de noviembre