Shirin Salehi trabajando en la Fundación CIEC. Imagen cortesía de Shirin Salehi

Por Maria-Veronica Balaci- Teodorescu

Nacida en Teherán (Irán) en 1982, Shirin Salehi reside y trabaja actualmente en Madrid. Es técnico superior de grabado y técnicas de estampación por la Escuela de Arte Número Diez de Madrid (2009-2012). Ha profundizado sus conocimientos en grabado en los talleres del Círculo de Bellas Artes durante los últimos cuatro años junto a cursos como el módulo de Calcografía del Master de Obra gráfica de la Fundación CIEC con Alejandro Fernández Arango, Tita Fraga, Anne Heyvaert, y prácticas con Antonio Palomo en el taller de “Obra gráfica original”, entre otros. Actualmente continúa su formación e investigación en la gráfica en el taller de grabado de José Rincón. Paralelamente a su formación en grabado, ha asistido al taller de la pintora madrileña Sonia Alonso (2008-2012).

Su obra se ha hecho acreedora de becas nacionales e internacionales como la beca del Círculo de Bellas Artes para formación en la fundación CIEC y becas de residencia artística en la Fundação Bienal de Cerveira (2012) y en el centro de creación aLfaRa StuDio (Salamanca, 2011). Ha sido galardonada en diversos certámenes destacando: 1º premio I Concurso internacional FIGBilbao (2012), 1º premio XIX Concurso internacional de grabado “Villa de Cebreros” (2012), 3° premio Certamen nacional de grabado “José Caballero” (2012), 3° premio XXXIII Certamen de minicuadros (2012), selección en el XIX Premio Nacional de Grabado (2012), selección en el XXI Certamen Jóvenes Creadores del Ayuntamiento Madrid (2012), selección en los XXXX y XXXIX certámenes “Carmen Arozena” (2012 y 2011), 1º premio XVIII Concurso de socios del Círculo BBAA Madrid (2011) y 1º premio de X y IX Concurso día de la mujer, Distrito del Retiro, Ayuntamiento de Madrid (2011 y 2010).

Dentro de sus exposiciones individuales destacan: “¿Quién escribirá nuestra historia si estamos condenados al silencio?” (Showroom Brita Prinz, Madrid, 2012) y “Nuevo nacimiento” (Centro Cultural Persépolis, Madrid, 2009). Entre las exposiciones colectivas en las que ha participado: Fundación Fondo Internacional de las Artes FIArt (Madrid, 2013), el Reial Cercle Artístic (Barcelona, 2013), Fundación CIEC (Betanzos, 2012), Galería José Rincón (Madrid, 2012), Centro Cultural Hortaleza (Madrid, 2012), «Amenaza la ruina», Escuela de Arte número Diez (Madrid, 2011), Deus máquina (Madrid, 2011) y el Círculo de Bellas Artes (Madrid, 2011) entre otros. Su obra se encuentra en las colecciones de la Fundação Bienal de Cerveira (Portugal), Fundación CIEC, Fundación Marazuela, Colección FIGBilbao, la Biblioteca Nacional de España, Centro de Creación aLfaRa StuDio, el Ayuntamiento de Madrid, el ayuntamiento de Cebreros y el Círculo de Bellas Artes de Madrid.

Es miembro de la Asociación de Mujeres Artistas Visuales y de la Asociación Española de Pintores y Escultores, donde actualmente colabora como docente de los cursos de grabado calcográfico.

Hasta el próximo 1 de marzo su proyecto «Bailando con el carcelero» puede verse en la Fundación Fondo Internacional de las Artes FIArt de Madrid en el marco de la exposición «Premios FIG Bilbao 2012».

Tu obra gráfica “Bailando con el carcelero», presentada en el Festival FIG Bilbao 2012, es una visión personal de la novela ¨Invitado a una decapitación¨ de Vladimir Nabokov. ¿Qué te llevó a seleccionar esta novela? ¿Nos puedes contar más sobre el proyecto «Bailando con el carcelero¨?

La lectura del libro coincidió de manera casual con el trabajo que realizaba en el momento. Desde hace tiempo estoy centrada en proyectos donde el medio artístico está al servicio de la denuncia. La novela de Nabokov es una pura denuncia de la pena de muerte y la tortura, a través de una poética narración de la historia del condenado Cincinnatus. Para mí, la más bella de todas las sorpresas de Nabokov a lo largo de «Invitado a una decapitación» es la capacidad soñadora de Cincinnatus. Toda la irracionalidad y el absurdo del juego del régimen autoritario y de sus peo­nes se cae abajo a través de la fuerza del sueño y la imaginación. Esto me ha dado fuerza para seguir con mi personal denuncia mientras avanzaba con el proyecto.

Imágenes de la serie “Bailando con el carcelero», Festival FIG Bilbao 2012. Cortesía de Shirin Salehi

¿Que significación tiene para ti la técnica del grabado? ¿Cómo empezó todo?

Mi comienzo en el grabado fue hace cuatro años, fruto de una casualidad: gracias a la generosidad de un grabador querido que me invitó a probar la técnica. De ahí, tras varios años de trabajo, se ha convertido actualmente en mi principal medio de expresión.

¿Te sientes más cómoda con alguna técnica o procedimiento en particular?

Trabajo normalmente el metal y la madera, pero con mayor preferencia el metal, es decir, la calcografía, debido a mi identificación personal con ella como medio de expresión. Dentro del abanico de técnicas artísticas, la calcografía, y en particular, las técnicas indirectas, me permiten una na­rración personal e íntima a través de las cuales puedo trasmitir mis inquietudes artísticas. Creo que la razón de mayor peso son los encuentros inesperados cuya aparición acompaña todo el proceso de grabado: una magia sorprendente como resultado de la simbiosis del metal y el mordiente. Dentro de un oficio metódico y de gran rigurosidad, la propia naturaleza de la técnica rompe todas las reglas y pone a prueba al grabador, y entonces el proceso cobra mayor importancia que el resultado. Esta es la razón de mayor prioridad para mi elección de la técnica, debido a la importancia que doy personalmente al proceso de trabajo.

Viniendo de Irán, ¿qué nos puedes decir sobre el arte que se mueve allí?

Mis vivencias personales en Irán como artista han sido escasas. He desarrollado mi carrera artística, hasta el momento, dentro de Europa. Pero conozco bien la situación. El arte es una poderosa herramienta de expresión y comunicación. Y, a pesar de obstáculos, ausencias de libertades, y hasta castigos, los artistas seguirán expresándose. Es su propia naturaleza, aunque, claramente, de aquellos honestos y leales a sí mismos. Es una difícil y delicada lucha.

¿Cuál es el proceso más duro a la hora de comenzar un proyecto?

No encuentro particularmente duro el comienzo, sino más bien ciertos momentos de búsqueda dentro del proceso de trabajo, especialmente cuando toca romper una línea trazada anteriormente que necesita de cierta desviación.

¿Que deseas trasmitir al público con tu trabajo?

Estoy convencida de que intentar transmitir un mensaje concreto al público, más allá de una búsqueda compleja e innecesaria, resta sentido a la obra. Para mí no es el objetivo de la obra, aunque forma parte de ella por la cualidad comunicativa del trabajo artístico. No depende del artista, sino de una conjunción de factores culturales y sociales, además de la sensibilidad y atención del espectador.

¿Cómo definirías la situación del arte actual?

Particularmente vulnerable, debido a la situación económico-social, obligándonos a justificar todos los días hasta la propia existencia del arte. Tenemos que trabajar duro, con mucha firmeza y perseverancia, para no solamente ir hacia una situación cultural y artística de mayor solidez, sino para proteger lo conseguido hasta el momento.