Entrevistamos a José Jurado, director del proyecto, un día antes de la pegada de todos los carteles en las calles de Berlín.

¿Cómo surge el proyecto Marca España? 

Surge de forma muy sencilla, como ya he comentado en algunos medios. Pette, el dueño del espacio, me lo cedió al poco tiempo de llegar a Berlín para hacer una exposición. Aquella misma tarde hice un pequeño vídeo que colgué en Facebook, y al ver la buena acogida por parte de otros artistas y amigos empecé a pensar cómo hacer algo sencillo que no tuviese un gran coste ni para mí ni para los artistas pero que sí invitase a mucha gente a participar. Al ver el cartel de la compañía telefónica ofreciendo las llamadas baratas a España es cuando me vino la idea definitiva de colocar otros pósteres diferentes hechos por artistas, todos bajo una misma idea. David Crespo estuvo conmigo desde el inicio en Berlín aunque después volviera a España, antes de iniciar la convocatoria. Pude debatir, recibir consejos y él me puso al día de la situación en Berlín para muchos españoles tras haber residido aquí también con otra beca Leonardo.

Se presentaron a la convocatoria alrededor de unas 300 obras. ¿Cuáles fueron los criterios de selección para la exposición? ¿Qué rasgos destacarías de la misma?

Hemos seleccionado las imágenes las cuatro personas dentro de la organización, otorgando cada uno de nosotros un máximo de 3 puntos a cada obra en hojas independientes; luego en un excel se ponían en común todas las puntuaciones. Las obras que llegaban a 10, 11 y 12 entraban y las otras quedaban fuera muy a nuestro pesar. Me hubiese gustado meterlo todo, ya que hay cosas muy buenas que también se han quedado fuera o que han llegado fuera de plazo. Mi idea en un principio era meterlo todo y reducir el tamaño de las impresiones pero al ver la avalancha de trabajos que se estaba recibiendo ha sido imposible, coordinar todo ese trabajo ha llevado mucho tiempo. También ha sido importante que fuese viable económicamente para nosotros, ya que somos quienes estamos a cargo de los gastos. Aquí no hay instituciones ni subvenciones de por medio, solamente artistas españoles o de otros países pero residentes en España dentro de un espacio berlinés y textos para la exposición de tres personas diferentes pero vinculadas también con España: Georg Zolchow, comisario alemán residente en Madrid; Inez Piso, una joven comisaría de Holanda que vive y conoce la escena artística española; y, por último, Avelino Sala, artista y comisario cuyo texto comienza con unas palabras del también comisario José Luis Corazón. En las paredes del espacio solo estaban colgados los textos.  He dispuesto los pósteres en la sala colgándolos en el aire mediante sedal y clips para no ponerlos en la pared, que es el lugar donde irán al final. A veces no es tanto el hecho de tener mucho o poco dinero para hacer algo, sino ponerle muchas ganas y desarrollar una idea hasta el final, salga bien o mal.

La selección ha sido un muestreo de todo lo recibido en la convocatoria; esto es lo que se ha recibido. Tampoco nosotros esperábamos esta acogida y difusión, ni de lejos. Si hay mucha gente descontenta con el país y sus gestores visibles, sean artistas o no, eso ya nosotros no podemos cambiarlo. También es verdad que una exposición como esta en España hubiera pasado sin pena ni gloria pero al mostrar estas cosas en Alemania la cosa cambia y crea otra percepción de las obras.

No lo necesitaba, es una cosa bastante ambigua en concepto y forma. También me he replanteado si la convocatoria no se debiera de haber llamado, en vez de Marca España, de otra manera, quizás España Marca, para darle la vuelta y dar cabida a esos artistas a los que les hubiera gustado participar pero a los que el título ha echado un poco para atrás.

Ha sido inesperado, como he comentado anteriormente, el hecho de que estos acontecimientos sucediesen justo ahora, aunque una exposición con este número de artistas españoles fuera de España fuera llamativa. Hay muchas personas que critican el proyecto y lo tildan de oportunista por coincidir con estas declaraciones, o que critican por criticar. De todas estas opiniones siempre se aprende algo. Yo también he ido a exposiciones que no me gustaban. A veces si uno cree en algo firmemente hay que tomar la iniciativa. La coordinación de todo el trabajo no ha sido fácil y hay muchas horas de trabajo detrás. Agradecemos enormemente a todos los medios su atención.

Mañana sábado 27 a lo largo de toda la ciudad de Berlín, en diferentes puntos, algunos de ellos escogidos por sus autores. Con un cubo, una brocha y cola para pegarlos. Necesitaré ayuda posiblemente para la documentación de la acción.

Pese a que estamos recibiendo peticiones para ello no lo vamos a hacer. Creemos que es un proyecto que solo tiene inicio y cabida como se ha propuesto desde el inicio, y eso, claro, desvirtuaría la propuesta inicial. La presentación del catálogo sí se hará en España, en Madrid, en un espacio que se anunciará en la web www.marca-espana.tumblr.com, que tenga las mismas características del usado en Berlín. Pero esto ya tranquilamente, para que quede lo mejor posible. Han sido dos semanas, estas últimas, a contrarreloj.

Regresaré a España la semana que viene, al finalizar Marca España. España está de capa caída con el cierre de muchos espacios culturales, y afuera tampoco es que nos esperen a los artistas españoles o agentes culturales. Hay artistas muy válidos dentro del país, pero el equipo que deben formar gestores culturales, instituciones, comisarios, público, galerías y artistas está un poco desmembrado. Para que esto funcione debe haber más educación en primer lugar y también que cada una de esas partes tenga su función clara y haga bien su trabajo. Está bien hacer exposiciones en casa, pero siempre llega un punto en el cual hay que salir fuera a hacer cosas para cambiar de aires. España es el lugar de donde soy por muy lejos que me vaya, es donde me gustaría vivir pero ahora mismo es complicado saber dónde va a ir uno a parar tal y como están las cosas.

Hay varios y muy interesantes jóvenes artistas residentes en la ciudad, aparte de los ya conocidos, como pueden ser Regina de Miguel o Santiago Ydañez . Son recomendables también: Ángela Losa, Florencia Rojas, Brais Genn y José Carlos Izquierdo entre otros muchos. Hay que destacar también espacios como el Boots Bau en Neukölln, gestionado por Natalia Blanco y Bárbara Fonseca, o el Kleiner Salon, este en Kreuzberg, donde hoy finaliza su exposición Javier Lozano.