Laia Estruch por David Armengol
Pese a situar su punto de partida en la escultura, la obra de Laia Estruch (Barcelona, 1981) se centra especialmente en la performance. Un acontecimiento temporal, escénico y físico que le permite explorar las dos constantes básicas que definen su modo de entender la práctica artística. Por un lado, la oralidad, dando lugar a un constante trabajo de escritura y adaptación textual; por el otro, la gestualidad, donde cuerpo y espacio dialogan siempre en busca de un nuevo sistema de conexión entre ambos. Un diálogo que, en la medida de lo posible, intenta liberarse de las convenciones y roles preestablecidos que determinan nuestra relación corporal con el entorno inmediato.
La narración basada en experiencias y situaciones biográficas juega un papel destacado en su modo de acercarse al relato. Un relato personal pero a su vez capaz de generar distancia emocional y erigirse como un ejercicio de experimentación donde las historias iniciales de Estruch son alteradas y traducidas a un lenguaje sonoro y coreográfico más propio de las artes en vivo que de las artes visuales. De este modo, sus performances se sitúan a medio camino entre el monólogo, el spoken Word, la danza o el concierto. Una posición intermedia y flexible desde la que la artista puede insistir en otra de sus principales preocupaciones: la condición escultórica de la performance. Un interés por la forma y el volumen que deriva en la incorporación en sus piezas de materiales objetuales y registros gráficos a modo de partituras. Y del mismo modo que la partitura – o incluso la lista de canciones que va a interpretar un músico o banda – sirve en música como pauta del tiempo de ejecución del intérprete, algo similar ocurre en las performances de Laia Estruch, donde dicho elemento sostiene además una presencia estética y conceptual.
Por este motivo, sus acciones establecen frecuentemente conexiones directas con el ámbito del teatro y de la música. Algunas veces interviniendo u ocupando sus espacios de representación (el escenario del teatro, la distancia con la audiencia…), otras adaptando sus modelos de difusión y distribución (edición de registros sonoros tales como vinilos o cd’s, colaboraciones estrechas con músicos…) a las dinámicas de consumo de sus proyectos artísticos. En este sentido, y como es habitual en el arte de acción, la documentación y el archivo de sus directos complementan su trabajo a través de grabaciones sonoras, vídeos o publicaciones.
Una de las piezas que mejor refleja la naturaleza sonora de su trabajo es Jingle (2011), la edición de un vinilo en el que, tomando como punto de partida una pieza anterior – The Announcement, a song, básicamente el anuncio musicado de una performance – la artista genera la edición perfecta de varias piezas sonoras de carácter publicitario adaptadas al mundo del arte. Así, la información textual previa a un evento artístico (texto introductorio en un flyer, horario, contacto, web…) se adapta al canto y a la sintonía musical para convertirse en sí mismo en acto performativo. Para ello, Laia contó con la colaboración de diferentes músicos que versionaron sus textos ofreciendo así diversos tonos y ritmos a su canción.
Presentada directamente en un teatro – concretamente la Sala Villarroel de Barcelona – Enlloc d’actuar fabulo (En lugar de actuar fabulo, 2012) es una pieza escénica ordenada en cuatro performances que exhibe las múltiples alteraciones de un referente inicial de carácter autobiográfico; concretamente un registro de vídeo de 2009 en el que la artista entrevistaba a su padre. Un trabajo de adaptación oral donde Estruch explora los sistemas de transmisión de la memoria a través de un ejercicio fonético y corporal que desdibuja el guión original mediante improvisaciones sensibles al propio espacio teatral. Un ejercicio de intensidad física que, al igual que pasa en la mayor parte de sus proyectos, vuelve a incorporar la música como banda sonora de lo acontecido.
Desde de 2015, Laia Estruch está trabajando en Álbum Victoria, un nuevo proceso de investigación performativa basado en un pequeño álbum de dibujos de un pintor poco conocido llamado Jordi Samsó Barnadas (1929-2008). Tras encontrar dicho álbum en un mercadillo y establecer diversas conexiones emocionales e intuitivas con su entorno cercano, la artista está desarrollando un ejercicio libre de interpretación personal y traducción de lo gráfico a lo escénico que ha provocado ya la presentación de diversos capítulos en contextos artísticos y escénicos. De nuevo, los dibujos de Samsó funcionan como un reclamo inicial que deriva en un análisis exhaustivo de las posibilidades del cuerpo, la voz y el tiempo para narrar la experiencia escénica.
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Laia Estruch vive y trabaja en Barcelona. Tras estudiar Bellas Artes en la Universidad de Barcelona, completó su formación académica en el programa de estudios de The Cooper Union en Nueva York, donde pudo profundizar en sus intereses performativos. Ha expuesto en los principales espacios de arte emergente o en vías de consolidación del contexto catalán, tales como la Sala d’Art Jove, la Biennal de Valls o BcnProducció. Además, su trabajo ha podido verse en espacios artísticos de la misma ciudad como la Fundació Antoni Tàpies, Fabra i Coats Centre d’Art Contemporani, la Fundació Joan Miró o el MACBA, actuando también en eventos dedicados a la poesía y la palabra como el festival Poesía i + de Caldes d’Estrach o el Antic Teatre. A nivel nacional, ha expuesto en eventos como Arte Santander o en espacios como Combo Gallery en Córdoba. Como complemento a su práctica artística, Laia Estruch ha impartido numerosos talleres de performance.
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David Armengol (Barcelona, 1974) es comisario independiente y combina su práctica curatorial con otras actividades paralelas como la gestión cultural y la docencia. Especialmente interesado en la condición social del artista y la funcionalidad y/o disfuncionalidad del arte, en los últimos años ha trabajado en proyectos expositivos derivados de una lectura narrativa y performativa del paisaje. Sus proyectos han podido verse en espacios de arte contemporáneo como Caixaforum Barcelona (2008), Matadero Madrid (2010), la Fundació Joan Miró de Barcelona (2012-2013), Fabra i Coats Centre d’Art Contemporani de Barcelona (2014) o EAC Espacio de Arte Contemporáneo de Montevideo, Uruguay (2015). Actualmente, su práctica curatorial recupera ciertos intereses en la producción sonora, estableciendo links entre arte contemporáneo
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Imágenes
1. Jingle, 2011. Edición de vinilo
2. Publicaciones derivadas de su proyecto Jingle. BcnProducció 2011
3. Enlloc d’actuar fabulo (En lugar de actuar fabulo), 2012. Performance en el teatro Villarroel, 2012.
4. Performance al teatre, 2012Edición de cd. Diseño: Ariadna Serrahima.
5. Performance /fu:d/, 2014. Fundació Antoni Tàpies, Barcelona.
6. Performance /fu:d/, 2014. Detalle. Fundació Antoni Tàpies, Barcelona.
7. Álbum Victoria, 2015. Performance. Adn Platform, Barcelona
8. Álbum Victoria, 2015. Performance. Adn Platform, Barcelona
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