Desde que Héctor Puché llegó a Madrid en el 2001 procedente de Barranquilla (Colombia), tenía la intuición de que quería hacer algo desinteresado por el planeta, pero no sabía a ciencia cierta cómo desarrollarlo. Después de haber estudiado un Máster en Gestión Audiovisual y Multimedia, un posgrado en Ventas Internacionales, Dirección y Producción de cine y televisión, Filosofía, dirigir dos compañías de danzas afrocolombianas y formar su propia Productora de Eventos y Comunicaciones TwentyFourSeven, se dio cuenta de que la idea persistía no sólo en su cabeza, sino en su corazón. Fue entonces cuando decidió crear la Fundación Budhi y emprender proyectos de desarrollo medioambiental sostenible. Actualmente ha puesto en marcha el programa de formación “BeAmazon” con el que pretende salvaguardar las áreas naturales y en peligro de extinción del Amazonas colombiano y mejorar la calidad de vida de las comunidades indígenas.

¿Cómo surgió la idea de BeAmazon?

H.  La idea surgió hace 3 años, en julio. Creo que en medio de un golpe de calor, entre en trance y me llegó la idea desde arriba. (jajaja) En serio, creo que mi lóbulo derecho del cerebro recibió esa información por intuición y desde ese momento no he dejado de investigar y trabajar.

¿Crees que este es el momento idóneo y casi límite para desarrollar este tipo de proyectos?

H.  Si no fuera el momento idóneo, no me hubiera llegado la idea, la fundación no existiría y no se estuvieran materializando acuerdos.

¿Hacia dónde va BeAmazon?

H.  BeAmazon va a cada zona de bosque tropical, bosque primario en peligro de extinción. Donde esté BeAmazon procuraremos que quienes habitan esas áreas naturales sean formados tanto técnica como profesionalmente para hacer frente a las dificultades que tengan. Este proyecto no se circunscribe sólo al área amazónica colombiana, ni a los 8 países que la comparten. Este proyecto quiere llegar a Indonesia, Rusia, China, Canadá, África, a todos los bosques que están actualmente siendo explotados sin ningún tipo de conciencia.

¿Cómo describirías la primera conexión que tuviste con las comunidades indígenas del Amazonas colombiano?

H.  Los indígenas, al contrario a la manera de pensar generalizada, son personas muy desconfiadas y reservadas, pero en el momento en que te abren su corazón, te sientes como uno de ellos. Es una lástima que muchas organizaciones internacionales que se “dedican” a desarrollar proyectos de cooperación hayan hecho tanto daño. Las reuniones que mantuve con los líderes indígenas del trapecio amazónico, duraron largas horas de argumentación. Gracias a Dios que son personas muy intuitivas y se dejan llevar por su yo interior y es allí cuando me reconocieron como parte de su comunidad y se dieron cuenta que el proyecto BeAmazon es completamente transparente.

Partiendo de tu experiencia con las comunidades indígenas de la Amazonía colombiana y su relación con el entorno, ¿consideras que es necesaria una vuelta a lo primitivo, a lo natural?

H.  Primero hay que aclarar que primitivo no significa atraso tecno-cultural y social. Debemos regresar al estado donde el ser humano se consideraba parte de la naturaleza. En ese tiempo de la historia de la humanidad existía un equilibrio perfecto entre el hombre, la cultura, su desarrollo y la naturaleza. Debemos volver pero para retomar el conocimiento que hemos dejado atrás.

¿A qué atribuyes la falta de conciencia ambiental en el mundo moderno?

H.  Precisamente a que no nos sentimos parte de la naturaleza. La gran mayoría de personas que vivimos en ciudad hemos dejado de aprender de nuestro entorno natural. Eso se comprueba cada vez que ocurre un desastre natural. Muchos no estamos preparados para hacer fuego con nuestras manos, saber cómo buscar alimento, mucho menos diferenciar lo que podemos o no podemos comer. Hemos pasado de estar en paz con la naturaleza a que la naturaleza sea nuestra peor enemiga. Es simplemente absurdo.

¿En qué consiste 1€=1 árbol?

H.  La idea es que las personas se convenzan de que con tan poco se puede hacer mucho. La campaña salva un árbol por un euro, no se debe entender literalmente. Es difícil salvar un árbol por 1 euro la verdad, pero mi idea es generar volumen de donantes. ¿Imagina que el proyecto alcanzara a 100.000 personas que donasen 1 euro alrededor del mundo? Con ese dinero podríamos dar electricidad a 4 comunidades en el Amazonas, o darle agua potable y construir un acueducto a dos comunidades, o crear varias piscifactorías para que más de 4000 personas puedan comer pescado diariamente y vivir de las ganancias que generarían esos cultivos de peces. Ojalá pronto podamos tener al menos el 25% de ese objetivo para comprar la maquinaria necesaria para comenzar las obras.

Completa la frase: Un mundo sin árboles sería…

H.  Sólo le pondría una palabra: “Un mundo sin árboles, no sería”.

¿Por qué un hombre como tú, que no eres parte de una empresa multinacional, ni de una institución poderosa y tampoco un filántropo millonario decide lanzarse a esta aventura?

H.  En la Fundación Budhi tenemos el lema: “el futuro es pensar en presente”. Eso es exactamente lo que estamos haciendo ahora. Un amigo me preguntó exactamente lo mismo cuando se enteró que había decidido crear una fundación sin ánimo de lucro y yo le conteste “no puedo esperar a ganarme la lotería o a ser millonario para ayudar a los demás”. Si todos entendiéramos que hace falta tan poco para hacer cosas por el mundo, sin duda, sería completamente diferente.

¿Qué implica ser Be?

H.  SER con mayúscula. Amarte a ti y a los demás. Buscar la libertad interior. Convertirte en un virus de amor y contagiar a todo tu entorno. Ser proactivo, consiente del valor de la naturaleza, pero sobre todo tener la capacidad de desaprender las creencias para dar espacio a nuevas formas de conocimiento y desarrollo personal.

Si desean conocer sobre BeAmazon y la fundación Budhi pueden consultar en estos siguientes links.

http://beamazon.org/es/crea/salva-un-arbol/   Campaña 1€ = 1Árbol

www.beamazon.org

www.fundacionbudhi.org