Eulàlia Grau presenta en el MACBA de Barcelona “Nunca he pintado ángeles dorados”, un proyecto expositivo que ofrece un exhaustivo recorrido por sus»pinturas» –como la propia artista denomina sus obras–, las cuales hablan hoy con un interés renovado.
Eulàlia Grau, «Aspiradora», 1973. Imagen cortesía de MACBA
La exposición no está organizada como un recorrido estrictamente cronológico, sino que se construye como un relato visual centrado en temas que siempre han interesado a Eulàlia Grau: desde los mecanismos de control más evidentes, como la policía o las cárceles, hasta dispositivos más sutiles pero no por ello menos eficaces, como la escuela, las jerarquías laborales, el acceso a la vivienda y a la justicia o los roles de género. Sus serigrafías y telas emulsionadas se exponen junto a trabajos menos conocidos como carteles e intervenciones gráficas en revistas y libros, medios que la artista utiliza para acceder a un público más amplio, más allá de los circuitos del arte, entonces prácticamente inexistentes.
Las imágenes extraídas de los medios de comunicación impresos constituyen la materia prima del arte de Eulàlia Grau (Terrassa, 1946). Desde principios de los años setenta, crea montajes fotográficos y collages que actualizan la tradición vanguardista del arte comprometido con valores que están en crisis en el momento histórico de la producción de la obra. La artista denuncia el modo en que la prensa de la época, en línea con los poderes económico y político, sirve a los intereses de una sociedad vigilada, censurada, injusta y machista. Los medios propagan modelos sociales de dominación económica y cultural, y formas de violencia ideológica y física. La obra de Eulàlia se ha convertido en el documento de un periodo de cambios y crisis que presenta incómodos paralelismos con el presente. Su opción estética no se entiende sin un firme compromiso ético: ocupa un lugar destacado entre las prácticas artísticas que constituyen el espacio de expresión de los feminismos de finales de la modernidad, y forman parte de los movimientos de opinión que impulsan profundos cambios en la sociedad durante los últimos años de la dictadura de Franco y la Transición.
La exposición recorre el trabajo de Eulàlia Grau haciendo énfasis en las obras de los años setenta y principios de los ochenta, cuando su producción fue más intensa. Incluye obras como «Etnografías» (1972-1974), «La cultura de la mort» (1975), «…Inventemos también nosotros…» (1976), «El règim capitalista crea cada dia situacions com aquesta en la classe obrera» (1976), «Mínimos y máximos» (1976-1977), «Orden público» (1978) o «Klara» (1983-1984). Si la disciplina etnográfica se basa en un estudio descriptivo de las prácticas de los grupos humanos, Eulàlia Grau realiza una descripción visual de la lógica social en el contexto del capitalismo moderno. Escenas de manifestaciones, atracos a bancos, persecuciones policiales, trabajadores heridos y empresarios condenados por fraude pero indultados, forman parte de sus mosaicos visuales, tan modestos como impresionantes.
Título de la exposición: “Nunca he pintado ángeles dorados”
Sede: MACBA
Ciudad: Barcelona
País: España
Fechas: Del 8 de febrero al 26 de mayo 2013
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